Cada uno de nosotros posee su propio cubo. El cubo se llena o vacÃa permanentemente en función de lo que otros nos dicen o nos hace. Cuando nuestro cubo está lleno, nos sentimos bien; cuando está vacÃo, fatal.
Cada uno de nosotros dispone también de un cucharón. Cuando empleamos nuestro cucharón para llenar los cubos […]
